La mejor manera para contribuir a mejorar el medio ambiente y ahorrar en tu factura eléctrica
Sede
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Santa Cruz de Tenerife
Publicado el marzo 15, 2022
La principal ventaja de la energía solar es que se encuentra por todas partes, por ello, existe la posibilidad de realizar una instalación fotovoltaica aislada en cualquier lugar.
Es decir, puedes tener tu instalación fotovoltaica aislada en un lugar donde no llegue la red eléctrica o en una casa en una ciudad.
A mediados del siglo pasado, las únicas instalaciones que existían eran tipo instalación fotovoltaica aislada, ya que el objeto principal de ésta tecnología era hacer llegar la electricidad a lugares donde no llegaba la red de distribución eléctrica.
Ejemplos de equipos que se alimentan de energía solar sin conexión a red son los satélites meteorológicos o de telecomunicaciones que orbitan alrededor de la Tierra.
La principal diferencia que encontramos entre las diferentes tipos de instalaciones fotovoltaicas es que éstas no tienen ningún tipo de conexión a la red de distribución eléctrica, además necesariamente tienen que contar con baterías para poder almacenar la energía producida y así poder tener electricidad, cuando las placas fotovoltaicas no reciban luz solar.
A diferencia de las instalaciones aisladas, el sistema de conexión a red surgió después, donde se implementó el sistema con inversor para conectar directamente la energía de los paneles solares a la red eléctrica y así obtener dos formas de suministrar a la vivienda de energía.
Como hemos comentado anteriormente, su principal finalidad es surtir de energía renovable a las viviendas rurales donde no les llega la red eléctrica por su localización en lugares alejados. Pero cada vez más son las viviendas en zonas urbanas que desean ser autosuficientes, las que cuentan con un sistema aislado para así no tener que pagar factura de luz y no depender de comercializadoras ni variaciones excesivas de los precios.
Para poder contar con una instalación fotovoltaica aislada, es necesario conocer los materiales necesarios para llevara a cabo:
La primera pregunta que nos viene a la mente al pensar en instalar un sistema fotovoltaico sin conexión a red es ¿cuántas placas y baterías necesitaré para satisfacer mi consumo?.
Esta cuestión va a depender a su vez de varios factores, como la radiación solar existente en la localización de la vivienda y la energía que necesitemos obtener.
Para ello, tenemos que ver la capacidad del almacenamiento de las baterías, y elegir unas acorde a nuestro consumo y que sean suficientes como para dos días completos de suministro por si hubiera algún problema.
Algunas personas con instalaciones fotovoltaicas aisladas, cuentan con un generador de electricidad, ya que les da seguridad en el caso de que hayan varios días sin producción. Pero si la instalación está correctamente dimensionada, realmente no es necesario.